Un SOS por el CDP

Por: Felipe Mora
SANTO DOMINGO. -El Colegio Dominicano de Periodistas (CDP) está a punto de colapsar. Es noticia de dominio público.
Pese a todos los inconvenientes que acarrea el gremio, los compañeros que dirigen la institución quieren seguir con el control de esta. No sería lo mejor para la clase periodística.
Por el contrario, debe ser decisión libérrima de la mayoría de los periodistas impedir que la inercia y el desinterés sigan dominando en el CDP, creado por Ley 10-91, la cual no se aplica en toda su rigurosidad.
Los compañeros que controlan nuestro gremio deben comprender que no han podido sacarlo a flote. Muy por el contrario, este ha dado un viraje hacia atrás. Y el desinterés de los periodistas por su gremio ha pasado a ser una cotidianidad.
Deben dar paso a otra gestión que al menos muestre interés de enrumbar al CDP por nuevos senderos, con nuevas energías, y que no siga en el enclaustramiento al que lo han sometido.
Cada día que transcurre se hunde más la nave que da soporte al Colegio Dominicano de Periodistas. Y de seguir las cosas como van, la zozobra será cuestión de unos cuantos días.
Nunca he tenido trayectoria de gremialista. Pero los más de 40 años de ejercicio en distintos medios y en varias funciones del quehacer periodístico creo me hacen merecedor de poder sugerir estos conceptos respecto al marasmo que arropa a nuestro gremio profesional.
Me he enterado en días recientes del accionar de veteranos periodistas, así como de las nuevas generaciones que abogan por un cambio de rumbo del CDP, y el próximo 29 de agosto será decisivo para que los periodistas en su inmensa mayoría digan no al continuismo que desde hace tiempo lacera a esta institución, que es la casa de todos.
Tal como reza la consigna de Luis García, candidato a presidir el IPPP, “!Con capacidad, experiencia y honestidad transformaremos el curso del CDP!”.
Entre los periodistas en sentido general está cogiendo fuerza un clamor de que para las elecciones del próximo día 29 de agosto, la opción es votar por la plancha unitaria que lleva el Movimiento Convergencia.